Ubicada a 30 kilómetros de la ciudad de Nogoyá, y a 134 de Paraná Capital, se alza la pequeña localidad de Lucas González. Centenaria, rodeada de extensos campos verdes, y con esas características pintorescas que regalan los pueblos de la Provincia de Entre Ríos, es un destino que vale la pena descubrir.
Esta comunidad tuvo sus orígenes con el paso del Ferrocarril Central Entrerriano: a orillas de las vías se instalaron las primeras familias, que con su dedicación y esfuerzo fueron dando los primeros pasos para conformar su lugar de residencia. Con su nombre homenajea al empresario encargado del tendido férreo por estas tierras.
Fundada el 20 de abril de 1889, ostenta una historia signada por las culturas inmigrantes; sus tradiciones y costumbres. En la actualidad los visitantes podrán encontrarse con vestigios de estas corrientes europeas, que aún conservan el encanto de sus danzas; los sabores de sus comidas típicas, y se pueden admirar en todas las fiestas populares de la región.
Al llegar a Lucas González, el conglomerado urbano sorprende con calles tranquilas que exponen antiguas casonas combinadas con otras construcciones modernas y espacios verdes ideales para la recreación: la Plaza General San Martín indica el centro de la localidad, mientras que al frente aparece el imponente edificio de la Parroquia San Lucas Evangelista; el Polideportivo Municipal es otro de los lugares para compartir días al aire libre: un extenso predio permite practicar deportes, tomar sol, y deleitarse durante la época estival con su magnífica pileta olímpica; plazoletas y parques completan esta cartelera.
Para quienes gusten de las celebraciones tradicionales, y que convocan a lugareños y visitantes, la Fiesta Nacional del Lino será una fecha imperdible para arribar a estas latitudes entrerrianas: recordando y homenajeando a los colonos que cultivan estas tierras, invita a disfrutar de una noche de espectáculo que combina la danza, el canto, y la gastronomía regional.