Concepción del UruguayA la par de los tradicionales corredores turísticos entrerrianos, que siguen las costas de los grandes ríos Paraná y Uruguay, se extiende una microregión turística que eslabona localidades del departamento Uruguay con la ciudad de Rosario del Tala. La zona está impregnada de historia, escrita a fuerza de luchas y sangre en la epopéyica ilusión de un país federal, y cada uno de los rincones resguarda celosamente las huellas del valiente General Urquiza. Un circuito colmado de atractivos que conquista a su recorrido.
El camino comienza con todo su esplendor en CONCEPCIÓN DEL URUGUAY, ciudad donde se erigen imponentes siete monumentos históricos nacionales (Colegio Nacional Superior J. J. de Urquiza, Basílica Menor de la Inmaculada Concepción, Casa del Supremo Entrerriano Pancho Ramírez <Museo Delio Panizza>, Residencia de Urquiza <Edificio de Correos>, Casa del Gral. Victorica <Escuela de Enseñanza Técnica Nº 1>, Antigua Aduana Nacional <Sede UTN>, y Saladero Palacio Santa Cándida <Hostería>), y donde se tiende sereno el hermoso Banco Pelay, la playa fluvial más extensa del país.
Internándose hacia el oeste, y desviándose de la Ruta 39 apenas al norte, el sendero desemboca en SAN JUSTO, lugar donde se conserva la Parroquia Ntra. Sra. de los Dolores, mandada a construir por la viuda del Gral. Urquiza -Dolores Costa-, y donde se encuentra el prestigioso Museo de las Colonias, conformado por elementos que pertenecieran a los inmigrantes saboyanos.
A poca distancia aparece CASEROS, una tranquila localidad dedicada casi exclusivamente a la cultura regional. Allí la actividad gira alrededor del Centro Cultural “Margarita Thea", el cual funciona en el reciclado galpón ferroviario.
Desde Caseros, y por la Ruta Provincial 23, se llega a dos pequeños poblados: PRONUNCIAMIENTO, escenario cada verano de la magnífica Fiesta del Pollo; y PRIMERO DE MAYO, cocina de los mejores dulces y licores de la zona.
Estas tres últimas poblaciones se encuentran unidas por el Trencito del Ferroclub Central Entrerriano, que parte los fines de semana desde Villa Elisa.
La próxima parada inevitable es el mítico PALACIO SAN JOSÉ, octavo Monumento Histórico Nacional del circuito, y centro de atracción del mismo.
Volviendo a la Ruta 39, y después de cruzar el río Gualeguaychú, se arriba a HERRERA, población de familias italianas llegadas en el Siglo XIX, cuya historia se refleja en el Museo “Julián Herrera”. Actualmente Herrera funciona como puerta de entrada a novedosos emprendimientos turísticos -como lo son la Cabaña de Caballos Criollos “Don Roberto” y la Chacra “Los Quinchos”-, y a la famosa Estancia San Pedro perteneciente a la Familia Urquiza.
Este viaje imaginario conduce posteriormente a VILLA MANTERO que, emplazada a orillas del Arroyo Gená, ostenta orgullosa su Museo Regional colmado de piezas antiguas donadas por los vecinos, y su Paseo de Artesanos “Emilio Perina”.
Donde la Ruta 39 corta a la Nº 20 y se cruzan los rieles, se alza casi desapercibido BASAVILBASO, pueblo donde es imprescindible visitar el Museo Ferroviario y seguir las huellas plasmadas por la inmigración judía: la Sinagoga Novibuco, el Cementerio Israelita, una auténtica casa de “gaucho judío” y la 1º Cooperativa Agrícola de Sudamérica “Lucienville”.
40 kilómetros al norte, por la Ruta 20, atravesando diminutos poblados, se da con la aldea de SANTA ANITA, habitada por descendientes de los Alemanes del Volga que desconciertan con su misceláneo dialecto, y que cada diciembre organizan la tradicional Fiesta de la Trilla.
Después de pasar por el histórico Campamento Calá, donde el Gral. Urquiza organizara el Ejército Grande vencedor de Caseros, y cercano al sinuoso río Gualeguay, se hace manifiesto el fin del recorrido: la bicentenaria ROSARIO DEL TALA, donde la propuesta incluye disfrutar del agreste paisaje ribereño practicando birdwatching, canotaje o hallando la satisfacción en la apacible tarea pesquera.
En resumen, el excursionista de este camino encontrará: 8 monumentos históricos nacionales de los 14 que tiene la provincia, manifestaciones de la profunda impronta legada por el Gral. Justo José de Urquiza; indelebles huellas de la colonización italiana, judía, saboyana y de los alemanes del Volga; recónditos lugares naturales como el extenso Banco Pelay -sobre el río Uruguay-, las pequeñas playas del tortuoso río Gualeguay e innumerables arroyos. Y podrá también participar de las tradicionales Fiestas Populares que le revelarán con claridad las costumbres y creencias de cada pequeño lugar.
Verdes en todos sus tonos y texturas se esparcen por el territorio entrerriano llegando hasta las orillas acuosas...
